22 noviembre, 2006

No peeeeeelas

Orgulloso me siento de ser el principal impulsor en la Ciudad de México de la bella y socorrida frase: "No pelas un chango a nalgadas".
Esta frase es para mí como un hijo, pero como un hijo putativo, porque no me pertenece, bueno pensándolo bien sí me pertenece, porque la he hecho mía, pero yo no la acuñé.
Ya hubiera querido ser la mente que fraguara el yeso que dejó como escultura esa frase, pero no, el autor intelectual es mi padrino y amigo: Antonio Garibay.
Garibay (o Garigay), otrora representante de Adrián Fernández, me soltó esa maravilla hace ya 11 años en Indianápolis cuando andabamos por allá en las 500 Millas. Salió a propósito de las cualidades como piloto de cierto personaje de nombre Stan Fox, que luego terminó embarrado en un muro a 260 kilómetros por hora.
Fox estuvo a minutos de morir, pero sólo quedó casi cuadraplégico, y tras años de valiente rehabiilitación, el hombre volvió a caminar y a manejar, pero sólo para que ahora sí lo cafetearamos por estrellarse (ahora en su coche de calle) en un Freeway.
La cosa es que Toño se refirió a las habilidades de Fox así: "¡N'hombre, ese güey no pela un chango a nalgadas!", lo que me sacó inmediatamente una serie de carcajadas y de lágrimas, nomás de pensar a alguien tratando de despellejar a un mono a puro manazo.
No hay mejor manera de decir que no sirves, y tan es así que conozco a no menos de 100 personas que han tomado la frase como agua de uso y la emplean a la perfección.
Pero a partir de ahí, me he dado a la tarea de coleccionar otras de igual valía y no menos imaginación, que tienen un significado similar.
Qué me dicen de esta chulada: "No sacas un perro a mear". Es como para fundirla en bronce. Si un tipo no es capaz de llevar a un can a marcar su territorio, no sirve para nada. Incluso hasta mi amigo de la infancia el buen "Memorias" sacaba a hacer de las aguas al pekinés, cruzado como con rata de la señora Reloc, y mira que mi cuate no veía más allá de su entrecejo ni con sus lentes de fondo de Squirt.
No me consta, pero creo que esta epopeya del lenguaje tiene la marca de Iván Pirrón, por lo menos mía no es, pero de que es buena, es buena.
Mi buen Padillita (Miguel Ángel Padilla para los que leen Soccermanía) popularizó, no sé si son suyas, aquellas de: "No me arreglas un café" y la de "Hay maderas que no agarran el barniz", también un par de piezas que hacen oda de la ineptitud.
Y no puedo dejar de recordar al filósofo de la orilla del ring, el maestro Ignacio Beristáin, manager y purista del boxeo, que aunque no habla de estupidez, sino de vanidad, hace ver mal a cualquiera que quiera resumir mejor a un presumido.
Don Nacho me aventó una vez en una entrevista este juicio sobre el trabajo de algunos periodistas: "Mire joven, lo que pasa es que algunos de sus colegas le echan mucha caca a su papel". No se puede negar que aunque escatológica es un frasononón, digno de un personaje como don Nacho, un hombre bien entrado en los 60 años con uno de los rostros más chuecos que haya dejado el mundo de los mamporros y los jicamazos.
Así podemos seguir con Nachito y su "Le echas mucho arroz a tus novios" o "Todavía le cuelga el chile a don Felipe", que sin empacho alguno suelta en entrevistas con grabadora prendida y todo, pero creo que el ya clásico "no peeeeelas" ha marcado toda una época y a toda una serie de personajes de que plano no despellejan a un primate con sonoras palmadas.

3 comentarios:

Flack dijo...

Mi querido Pepper, tú sí...tú sí pelas!!! El texto que presentas está genial, original, y algo nostálgico sólo que creo que te faltó una frase muy buena que no sé si la haya acuñado nuestro amigo el Truck (léase el marido de Katya López, el padre de Mariana, el ex promotor de Nájera y amiguísimo de Roberto González, mejor conocido como Carlos Rodríguez)y que es "A chillidos de marrano...oídos de carnicero" Buenísima, excelsa y muy aplicable a un necio, aferrado y obtuso.

Chanfle II dijo...

Vaya buena noticia que tú, mi estimado PP Trompo, hayas salido del clóset para integrarte a la blogósfera. Y me llena de harto orgullo verme mencionado como el primer precursor de tu cosquillita bloggera. Felicidades de antemano por tener el valor y que no te valga.
Pero también de antemano me gustaría aconsejarte un punto clave en esto de las confesiones semi'públicas, que por lo que veo, ya lo estás aplicando en tus primeros posts: los blogs no son un concurso de simpatías.
No hay nada más bloggero que expresarte por tí mismo y no con respecto a los demàs. Como apuntas, se es o no se es. Y se nota luego luego, tú eres.
Ahora bien, como buen integrado que sabes que soy, quiero discernir en algo. ¿Sólo si le vas a un equipo jodido y malo significa verdadero amor? O sea, ¿sólo si andas con una fea significa que la quieres de verdà? Mira, mira, mira...
Soy madridista de cepa, cruzazulino do nascimento, yanqui ahuevo, laker a tu pesar y delfín a mi pesar. Y a todos esos equipos les voy tanto como tú a tus respetables chargers.
Mira que te lo digo a unos minutos de ver a mi Máquina destrozada una vez más. Esos, esos de veras que no pelan un pinche chango a nalgadas.

Te sigo leyendo, by sure.
Un gran abrazo
Chanfle II

Jorge Jair Melendez dijo...

No puedo sino aplaudir tu segunda entrega al blog. La califico de "Enoooorme pero enoooorme".